1 de Mayo, una fecha especial

El 1 de Mayo no es una simple fecha más. Es feriado por tratarse del día elegido para conmemorar a los trabajadores, pero todos a los que se nos hierve la sangre cuando escuchamos un motor de carreras, sabemos que esta fecha es especial. Porque el 1 de Mayo de 1994, Ayrton Senna se despistó en la curva de Tamburello y murió como lo hacen los grandes: Ganando.
Aquel piloto brasileño, que tras una meteórica campaña en el Karting y las fórmulas menores, debutó en la Fórmula 1en el Gran Premio de Brasil de 1984 con un Toleman-Hart; para después competir desde 1985 hasta 1987 en Lotus, desde 1988 hasta 1993 en Mclaren y en 1994 en Williams. Protagonizando una trayectoria que sería trágicamente interrumpida, precisamente una década después, pero en ocasión del Grand Prix de San Marino.
A lo largo de esos 10 años, “Magic”, cuyo nombre completo era Ayrton Senna Da Silva, obtuvo innumerables láureos deportivos: 3 campeonatos mundiales, (1988, 1990 y 1991); 41 victorias; 65 poles positions, 80 podios y 19 vueltas rápidas. Empero sus números no fueron lo que lo catapultaron a ser considerado como uno de los 3 mejores y más grandes pilotos de todos los tiempos, sino su indiscutible superioridad conductiva, potenciada hasta el infinito, si se tiene en cuenta que compitió contra muchos de los más destacados volantes de la historia, como Alain Prost, Nigel Mansell, Nelson Piquet, Gerhard Berger y con (un todavía muy joven), Michael Schumacher.
¿Quien podría olvidar sus proezas? ¿Quién olvidaría Mónaco´84? Cuando luego de haber largado desde la decimotercera ubicación con un modestísimo Toleman y bajo una terrible tormenta, logró llegar a las espaldas de Prost, quien con un Mclaren ganó una carrera atípica, que sólo duró 31 vueltas por la inclemencia del tiempo.
¿Quién sería capaz de olvidar aquellas definiciones en Suzuka?
¿Quién borraría de su memoria, tan sólo una de sus 6 victorias en el principado de Montecarlo?
¿Quién podría pasar por alto sus increíbles maniobras en clasificación, a bordo del Mclaren-Honda de 1500cv de 1988?
¿Quién conseguiría olvidar Donnington´93? Cuando habiendo largado desde el quinto puesto, llegó al liderazgo en la vuelta inicial; y ganó la carrera con neumáticos para piso seco, bajo una lluvia torrencial.
¿Quién podría borrar el recuerdo de su última victoria, en el Gran Premio de Australia de 1993?
¿Quién sería capaz de desprenderse de su mirada cálida, su actitud reservada y su fanatismo “patológico” por el Automovilismo?
Seguramente alguien que ignore que éste 1 de Mayo, se cumplen 14 años de aquel día en el que el gran Ayrton, pasó a la inmortalidad.


Mauro Negrelli