Tres de Cal y Una de arena

Arsenal se floreó ante el Goiás, logró un resultado impensado que le permite esperar la revancha con tranquilidad, sin apuros, con los tiempos y los números a su favor. El Arse salió con su humilde librito, lucha y mucho despliegue. Los muchachos de Alfaro se sienten cómodos cuando los buscan, cuando los atacan, cuando deben defenderse para lastimar con estocadas fugaces. Vencio al Goias 3 a 2 con goles de Damonte, Casteglione y Garnier. La revancha el miercoles 26 en Sarandi.
Otro que gano fue Lanus. Lanús le hizo sentir a Vasco da Gama que su casa es una fortaleza inabordable. Salió a la orden de Lanús por dominio de juego y generación de situaciones. Vasco tuvo una única virtud: el orden en defensa. Un desborde del pibe Bigleri derivó en el córner del cual Pelletieri metió el cabezazo goleador a los 32 minutos del primer tiempo. A los 34 Sand pudo haber aumentado el marcador, por medio de un penal que le contuvo el arquero Silvio Luiz. Pero el delantero tuvo revancha a los 32 minutos de la segunda etapa, luego de una corajeada de maxi Velazquez que lo dejo solo frente al arco, para que el nueve solo tenga que empujarla y poner de esta manera el 2 a 0 definitivo en el marcador.
En tanto, Boca vencio en la bombonera 2 a 1 a San Pablo con dos goles de Martin Palermo, en tanto que para los brasileños desconto Borges. De principio a fin, marcó claramente una superioridad sobre San Pablo. El medio fue de paso rápido y, con su gente satisfecha por lo que llegaba desde la cancha, Boca se empeñó en hacer del vértigo un estilo de juego. Podría haber sido un equipo con más pausa, que esperara el momento justo, buscar provocar el error del rival desde el dominio; sin embargo, no: la elección fue ir e ir.
El dañado, en este caso, fue el "peligroso" San Pablo. Que mostró la extrañeza de un equipo sutil e ingenuo a la vez, que cuando encontró esos espacios que el conjunto de Russo dejó atrás, pudo facturar un gol.
River cayo 1 a 0 con el Botafogo de Brasil. En un primer tiempo en el cual el equipo de Passarella fue dominado por el conjunto carioca, pero en la segunda etapa el ingreso de Peralta, le aporto mayor dinamica al juego millonario, pero el empate nunca llego. El 26 de septiembre la revancha en el monumental.